C U R L Y C R U S H

CURLY CRUSH - Lifestyle blog

thecurlycrush.blogspot.com
Ver todo mi perfil

SEXO, AMOR Y OTRAS HISTORIAS






Capítulo 6
La oveja negra



Popularmente siempre se ha asociado este término a personas díscolas, rebeldes, fracasadas, desgraciadas e incluso malas. 
"Es la oveja negra de mi familia", "siempre fue la oveja negra del barrio", "era la oveja negra del cole"...Sin darnos cuenta que esas ovejas negras eran personas diferentes, que no querían o incluso que su personalidad les impedía ser como el resto, y que en la mayoría de los casos por no sentir el apoyo familiar o social terminaban llevando una vida que no querían.
Afortunadamente ese concepto ya está cambiando, y ser la oveja negra, significa distinguirte del resto de iguales, cosa que veo muy positiva, ya que en definitiva la vida hay que vivirla para nosotros y no para los demás. Estudiar lo que te gusta y no lo que te impongan en casa, vivir sola/o, o en pareja sin tener que pasar por el altar para dar el gusto a tus padres, no bautizar a tus hijos si no crees en ello o practicar el veganismo si no te apetece comer animales...estas y tantas otras cosas que te hacen ser diferente y no por ello peor que los demás.



Yo estaba destinada a ser la oveja negra de mi familia, y mi madre siempre decía sintiéndose orgullosa: "Mi Silvia es que es de otro planeta" y recuerdo y repito mucho esta frase porque me sirvió para darme cuenta de que no tenía que dejarme influenciar por nada ni nadie, aunque no fue, ni es tarea fácil.



En el cole empecé a destacar por mis notas. Tenía facilidad para retener información y para procesarla, así que pasé muchos años sin estudiar ya que con las explicaciones en clase tenía suficiente. Ser del grupo de las "empollonas" tuvo sus pros y sus contras, ya que por el hecho de sacar buenas notas, muchas compañeras te cogían manía, y si ya eras de las preferidas de tus profesores, apaga y vámonos.
Sentir predilección por las personas es algo natural, y si encima ves interés por parte del otro cuando ejerces tu profesión, resulta casi inevitable tener preferencia por un grupo de alumnos, sobre otro que pasa de todo y no muestra ni el más mínimo interés por aprender. Evidentemente está en el profesor no hacer esto demasiado notorio, y motivar a los menos interesados para que aprendan a la par de todos.
Hay un dicho entre los padres que dice: ¿Qué dedo de la mano me corto que no me duela? En referencia a los hijos. Pero quizás no sea lo mismo cortarte el meñique que el pulgar, ya que uno te va a impedir ejecutar maniobras con la mano, y sin embargo el otro te va a permitir utilizar la mano con la misma normalidad , aunque el dolor del corte sea el mismo.
Entonces si entre padres existen preferencia con respecto a los hijos, como no va a sentir un profesor lo mismo por ciertos alumnos...


A mí me daba igual la manía o el caerles peor a algunas compañeras, porque yo me sentía satisfecha con mis resultados y por afinidad tenía amistad con un grupo de alumnas que eran parecidas a mí.
Hoy con el paso de los años y con los avances tecnológicos, se creó un grupo de WhatsApp del curso del 75, y todos esos comportamientos de niñas, lo vemos como algo lejano a lo que ya no damos importancia, pero que en cada caso, cada una lo vivió de una manera determinada.


Siempre fui feminista sin saberlo. Hace 40 años ni siquiera existía el concepto, y crecí en un machismo asumido y normalizado, pero que ya en mí me hacía plantearme el porqué las chicas no podíamos hacer lo mismo que los chicos.
Se nos educó de tal manera, que las mujeres debíamos esperar a que los hombres diesen el primer paso para todo: Pedirte salir, decirte que le gustabas, darte él el primer beso, y chorradas del estilo.
Yo me negaba a ello y cuando decía que no tenía por qué esperar a que un chico me dijese que le gustaba, mis amigas se escandalizaban diciendo que eso estaba mal.
La cosa empeoró cuando siendo ya una joven yo ligaba con quien me apetecía o podía (ya que no siempre fui correspondida) y disfrutaba de mi sexualidad igual que los chicos.
Esto me valió el título de "puta", ya que las mujeres no podemos acostarnos con quien nos de la gana sin ser definidas como unas guarras, ligeritas, zorras, putonas...
Ellos sin embargo haciendo lo mismo son unos ligones, unos cracks, hombretones, guaperas, machotes...



¡Ay Dios! ¿Y que todavía tengamos que estar hablando de esto? A mí en su día me dio lo mismo y contaba con veinti pocos años, así que fijaros ahora con 45 lo que me puede llegar a importar...
Pero es cierto que esto impidió el hecho de que tuviese pareja, ya que en mentes limitaditas de algunos hombres, no cabe la posibilidad de tener una novia y futura mujer que haya tenido muchas parejas sexuales, pero para acostarse con ellos sí les vale.
Hay que pensar más, pero pensar no está de moda, requiere mucho esfuerzo para algunos, y es tan simple como saber distinguir que cuando una persona está sin compromiso actúa de una manera, pero cuando está comprometida actúa de otra.



Yo jamás he sido infiel a ninguna de mis parejas, porque es mi condición, y no lo hago por ellos, sino por mí, porque no quiero que mi conciencia no me deje vivir, ya que yo sí sentiría la angustia de haber hecho algo mal y un posible daño a una persona que mereciéndoselo o no, no sale de mí el hacérselo.
Lo mejor de todo es que aquellos que critican el comportamiento de una mujer, por ejercer su libertad sexual son aquellos que más tienen que callar, porque lo que está mal no es acostarte con 20 tíos no teniendo pareja, lo que está mal es acostarte con otra persona, estando comprometido. ( a menos que la pareja tenga sus propios acuerdos al respecto, pero yo hablo de poner cuernos sin el consentimiento del otro)



Y seguimos con esta gente que no piensa. El desnudo. ¡Ay el desnudo! Cuan retorcida ha de ser tu mente, para ver únicamente sexo en un desnudo. 
Nunca he sido pudorosa, quizás porque nunca le he dado al cuerpo más importancia de la que tiene. Ya he dicho en otras ocasiones, que en mi cuerpo no hay vergüenzas, y que una mano tiene para mí el mismo valor que una teta, no quiero perder a ninguna de las dos.
Hace ya varios años, en mi cumpleaños, me hago varias fotos desnuda, con la idea de ver el paso del tiempo en mi cuerpo. Son fotos bonitas, artísticas, sin ninguna pretensión pornográfica o de contenido sexual provocativo. Pues bien, el hecho de desnudarme, se asocia nuevamente al sexo y algunos/as me han tildado de loca, sí de loca, por mostrarme desnuda, que es la cosa más natural del mundo, pero que los más moralistas ven como escandaloso.
Pues me voy a seguir desnudando hasta que tenga ganas de hacerlo, y no por eso voy a rodar una peli porno, cosa que me han propuesto, pero decliné la oferta porque no me atrae la idea.


Este año aún no me las he hecho, porque no he tenido tiempo y si todo va bien, pues el mes que viene verán la luz, ya que el primero interesado en verlas es mi novio, porque se siente muy orgulloso de mí y admira mi capacidad de hacer cosas creativas y me apoya, y en caso de no hacerlo se tendría que aguantar, ya que soy una persona libre, que ahora está acompañada, pero que no va a dejar de ser Silvia, ni de hacer lo que le gusta, ya que aprendió la lección hace años:
Nunca dejes de ser tú por otra persona, ya que cuando no te reconozcas, te echaras de menos y la infelicidad llegará a tu vida, porque no hay cosa más triste que vivir la vida que otro quiere y no la que tú deseas.


Me encanta ser "oveja negra", aunque a veces me supere la situación de tener que explicar que hay muchos modelos de vida, y que aunque la mayoría prefiera seguir el patrón social, aunque no le guste, existe una inmensa minoría, que viviendo la vida que hemos elegido somos felices, independientemente de estar o no en pareja, tener o no hijos, estar o no casados...
Es una frase muy repetida, pero creo que poco entendida, así que yo la voy a volver a decir:
La felicidad está dentro de uno mismo y no al lado de alguien.



Una vez un chico que tenía y tiene que callar más que nadie, se atrevió a decir delante de un grupo de personas en referencia a mí:
¡Uh! Esa tiene un currículum...¿Perdona? Mi currículum no tiene ni una mota. ¿Puedes tú decir lo mismo? No, no puede. De este y de otras piezas hablaremos más adelante. Supongamos que se llama Manuel...







Ser fiel a ti mismo te permite sentirte satisfecho, tener la conciencia tranquila y ser feliz.
No siempre tiene la razón el grupo mayoritario, a veces, las ovejitas descarriadas están en lo cierto, o al menos luchan por lo que creen. 
Me encanta esta foto, mi mirada, mi pensamiento.
Publicado por thecurlycrush.blogspot.com
Enviar por correo electrónico Escribe un blog Compartir en X Compartir con Facebook Compartir en Pinterest
Etiquetas: artículo de opinión , blog , Blogger , bloggers , capítulos , entradas , ideas , memorias , mi vida , mis ideas , opinión , pensamientos , reflexiones
Entrada más reciente Entrada antigua Inicio

ARCHIVES

  • marzo ( 1 )
  • febrero ( 3 )
  • enero ( 4 )
  • mayo ( 1 )
  • abril ( 2 )
  • octubre ( 3 )
  • septiembre ( 2 )
  • abril ( 6 )
  • marzo ( 10 )
  • febrero ( 8 )
  • enero ( 5 )
Todos los derechos reservados ©CurlyCrush /// . Con la tecnología de Blogger.